Capítulo 6

1 2 3 Así que, nosotros no debemos seguir discutiendo sobre lo que nosotros primero aprendimos sobre Cristo, cosas que todos los creyentes deben aprender al principio. Algunas de estas cosas son cómo parar de estar pecando y como empezar a confiar en Dios. Hay también cosas importantes que nosotros enseñamos sobre los varios tipos de bautismo, porqué nosotros usualmente oramos mientras ponemos nuestras manos sobre cada uno; y también sobre cómo Dios nos levantará a todos de la muerte y juzgará a todo el mundo en una forma que durará por siempre. De seguro, nosotros discutiremos estas cosas de nuevo más tarde, si Dios nos da la oportunidad de hacerlas. Pero ahora nosotros debemos discutir cosas que son más difíciles de entender; estas son cosas que nos ayudarán a nosotros a confiar en Cristo en todo teimpo, no importando que suceda. 4 Yo les explicaré porqué es importante el hacer esto. Algunas personas han entendido en un momento el mensaje sobre Cristo. Ellos aprendieron lo que era para Dios perdonarlos y para Cristo amarlos, y ellos recibieron regalos del Espíritu Santo. 5 Ellos encontraron por sí mismos que el mensaje de Dios es bueno, y ellos aprendieron como Dios trabajará poderosamente en el futuro. 6 ¡Pero ahora, si estas personas rechazan a Cristo, nadie será capaz de persuadirlos a ellos a parar de pecar y a confiar en Él de nuevo! ¡Este es así porque es como si estas personas han clavado al Hijo de Dios a Su cruz de nuevo! Ellos están causando que las personas desprecien a Cristo enfrente de otros. 7 Piensen en esto: Dios ha bendecido la tierra en la cual la lluvia ha caído frecuentemente y en la cual plantas crecen para los granjeros. 8 Pero lo que le sucederá a los creyentes que no obedecen a Dios es como lo que le sucede a la tierra en la que solo crecen espinos y cardos. Tal tierra es inútil. Se ha convertido en tierra en la cual los granjeros maldecirán y sus plantas serán quemadas lejos. 9 Ustedes pueden ver que yo les estoy advirtiendo, queridos amigos, a no rechazar a Cristo. Al mismo tiempo, estoy seguro de que están haciendo mejor que eso. Ustedes están haciendo las cosas que son correctas para aquellos quien Dios ha salvado. 10 Ya que Dios siempre actúa justamente, Él no va a pasar por alto todo cuánto ustedes han hecho por Él; Él no va a pasar por alto cuánto ustedes han amado y ayudado a sus compañeros creyentes, y cómo ustedes aún están ayudándolos a ellos. 11 Nosotros deseamos grandemente que cada uno de ustedes continúen esperando completamente el recibir lo que Dios le ha provisto a ustedes, hasta que ustedes reciban finalmente todo de parte de Él. 12 Yo no quiero que ustedes sean perezosos. En cambio, yo quiero que ustedes hagan lo que otros creyentes han hecho, aquellos quienes están recibiendo lo que Dios le prometió a ellos, porque ellos confiaron en Él y fueron pacientes. 13 Cuando Dios prometió hacer grandiosas cosas para Abraham, no había nadie más grande que Él mismo a quien Él pudiera pedir para forzar a Él mismo a hacer esas cosas. Así que Él se preguntó a sí mismo. 14 Entonces Él le dijo a Abraham: "YO CIERTAMENTE TE BENDECIRÉ Y YO CIERTAMENTE INCREMENTARÉ GRANDEMENTE EL NÚMERO DE TUS 15 DESCENDIENTES."Así que después Abraham pacientemente esperó por Dios para hacer lo que Él prometió, Dios hizo para él lo que Él le había prometido. 16 Mantengan en mente que cuando la gente promete algo, ellos preguntan a una persona más importante para castigarlos a ellos si ellos no hacen lo que habían prometido. 17 Esto es como usualmente suelen establecerse las disputas. Así que cuando Dios quería demostrarnos claramente a nosotros quién iba a recibir lo que Él había prometido que Él no iba a cambiar lo que Él había planeado hacer, Él dijo que Él se iba a declarar a Sí mismo culpable si Él no hacía lo que Él había prometido. 18 Él hizo esto para animarnos fuertemente, porque Él ha hecho dos cosas que no puede cambiar: Él prometió ayudarnos, y Él nos dijo a nosostros que Él se haría culpable si Él no nos ayudaba. Ahora, Dios no puede mentir. Ese es el porque hemos confiado en Él y ahora tenemos todas las razones para continuar haciéndolo. 19 Sí, nosotros con confianza esperamos recibir lo que Dios ha prometido hacer por nosotros. Es como si nosotros fuéramos un barco, en el cual su ancla nos está sosteniendo firmemente en un lugar. Aquel en quien nosotros con confianza esperamos que nos sostenga es Jesús, porque Él se ha ido a la misma presencia de Dios. Este es el porqué Él es justamente como el alto sacerdote quien va detrás de la cortina a la parte más interna del templo, donde Dios está presente. 20 Jesús fue a la presencia de Dios al frente de nosotros para permitirnos entrar al mismo lugar con Dios, también. Jesús se ha convertido en un alto sacerdote por siempre, en la forma en el que Melquisedec era un alto sacerdote.